sábado, 16 de mayo de 2009

Yo aprendí que las circunstancias de mi infancia son responsables por lo que soy hoy, pero no por los caminos que elegí siendo adulto. Que en una pelea, tengo que decidir de qué lado estoy, aun cuando no quiera verme envuelto en ella. Que cuando dos personas discuten no quiere decir que se odien, y cuando dos personas no discuten no significa que se amen. Yo aprendí que mi existencia puede cambiar para siempre en pocas horas por causa de personas desconocidas. Que los diplomas en la pared no me hacen ni más respetable ni más sabio que los demás. Yo aprendí que la palabra ‘amor’ pierde su sentido cuando es usada sin criterio. Que ciertas personas se van para siempre pase lo que pase. Que es difícil trazar una línea entre ser amable, no herir a las personas y luchar por las cosas en las que creo..